Un buen comienzo

Para que el año académico sea exitoso, es esencial que cada niño acuda a las citas de rigor para que su estado de salud sea óptimo

La lista de cosas por hacer antes del inicio de las clases es muy importante para todos los padres y cuidadores.

Por ello, para que el año académico 2020-2021 sea exitoso, es esencial que cada niño acuda a las citas de rigor que asegurarán de que su estado de salud sea óptimo para las exigencias de los estudios, las actividades fuera de clases y más.

Sabemos que los niños deben visitar a su pediatra para un chequeo rutinario, el cual forma parte de los requisitos para iniciar el nuevo año escolar. También deben tener las vacunas al día. Muchos padres también aprovechan esta temporada para llevar a sus hijos al dentista.

En las siguientes páginas, encontrarás las recomendaciones de salud para que tus niños comiencen el año con el pie derecho. Recuerda llamar con tiempo para sacar las citas.

Cuida la salud visual de tus niños

Entre las recomendaciones de salud no debe faltar la visita al oftalmólogo, ya que una buena visión es vital para aprender.

Según la Academia Americana de Oftalmología (AAO, en inglés) a medida que los niños crecen y cambian, también cambian sus ojos y su visión. Por ello, presta atención a cuatro señales de alerta:

Tiene un lapso de atención cortoTu hijo pierde rápidamente el interés en juegos, proyectos o actividades que requieren el uso de sus ojos por un período prolongado.
Se pierde durante la lecturaA medida que el niño lee, en voz alta o en silencio, es posible que tenga dificultades para ver dónde se encuentra en la página.
Evita la lectura y otras actividades cercanasYa sea de una manera sutil y más evidente, el niño puede evitar leer, dibujar, jugar o hacer otras tareas que requieran enfocarse de cerca.
Gira la cabeza hacia un ladoUn niño puede girar la cabeza hacia un lado cuando mira algo frente a él. Esto puede ser un signo de un error de refracción, incluido el astigmatismo. Girar la cabeza ayuda al niño a ver mejor.

¿Cuándo le toca el examen?

Se recomienda hacer uno o dos exámenes de visión anuales, o según lo indique el oftalmólogo.

Fuente: Academia Americana de Oftalmología

Sus vacunas al día

Antes de llevar a tus hijos a cualquier institución educativa del país, ya sea pública o privada, deben tener sus vacunas al día.

¿Qué vacunas debe tener?

Cuatro dosis de la vacuna contra la difteria, tétanos y tosferina (DTaP, DTP, DT), siempre y cuando la última dosis haya sido administrada en o después de los 4 años.
Tres dosis de la vacuna contra el polio (IPV), siempre y cuando la última dosis haya sido administrada en o después de los 4 años.
Una dosis de la vacuna contra el Haemophilus influenza tipo B (Hib), si fue administrada en o después de los 15 meses.
Tres dosis de la vacuna contra la hepatitis B.
Dos dosis de la vacuna contra el sarampión común, el sarampión alemán y las paperas (MMR).
Dos dosis de la vacuna contra la varicela (VAR).
Una dosis de la vacuna conjugada contra el neumococo, siempre y cuando haya sido administrada en o después de los 24 meses.
Una dosis de la vacuna contra el tétanos, la difteria y el pertusis acelular (Tdap) para todos los adolescentes de 11 a 18 años.
Una dosis de la vacuna conjugada contra el meningococo (MCV4) para todos los adolescentes de 11 años.
Todo adolescente de 11 a 12 años vacunado contra el meningococo requerirá una dosis de refuerzo a los 16 años. Si fue vacunado entre los 13 a 15 años también requerirá una dosis de refuerzo entre los 16 y los 18 años. Si la primera dosis se administró a los 16 años o más, no requiere refuerzo.

Los universitarios de nuevo ingreso también deben cumplir con los requisitos de vacunación que les corresponden por ley.

Fuentes: Departamento de Salud y Departamento de Educación

Mantén su sonrisa saludable

Una boca sana es más importante de lo que podrías creer, ya que una mala salud oral puede afectar no solo la sonrisa, sino también la habilidad para hablar, comer y más.

Por ello, la Asociación Dental Americana ofrece varios consejos:

Ayuda a tu hijo a crear el hábito de lavarse los dientes por dos minutos, dos veces al día, y que use hilo dental una vez al día. Si el niño tiene menos de 6 años, anímalo a que se lave sus dientes solo, pero ayúdalo en el proceso.
Entre los 7 y 12 años, el niño ya sabe cómo cepillarse los dientes, pero es probable que no quiera hacerlo. Continúa fomentando el cepillado y el uso del hilo dental.
Entre los 12 y los 18 años, definitivamente se establecen los hábitos de salud oral que tendrán en su joven adultez. Mantener un buen hábito de salud oral es imprescindible.

Certificado de examen oral

Los tutores legales de estudiantes de kínder, segundo, cuarto, sexto, octavo y décimo grado deben presentar en la escuela un Certificado de Examen Oral firmado por un odontólogo o dentista licenciado que evidencie que al menor se le ha practicado un examen oral en el período de seis meses antes del comienzo de clases. Sin embargo, también es buena idea que los niños y los jóvenes de otros niveles académicos asistan a sus citas de salud oral dos veces al año.

Meriendas nutritivas

Las meriendas ayudan a los chicos a ejecutar mejor sus tareas y, además, tienen un impacto positivo en su sistema inmunológico.

A continuación, la licenciada Doan López Ortiz, nutricionista dietista de Comer Bien, ofrece varias opciones:

Galletas integrales con palito de queso y fruta fresca
Tortillas integrales con guacamole
Yogur bajo en grasa con granola y fruta fresca
Palitos de zanahoria (baby carrots) con hummus
Rice cakes con mantequilla de maní y rodajas de guineo
Rodajas de manzana con mantequilla de cashews
Pinchos de frutas frescas
Pinchos de cherry tomatoes y queso mozarella
Pan integral con queso y jamón de pavo con 4 onzas de 100 % jugo
Rollitos de plantilla integral con mantequilla de almendras y fresas
Popcorn plain con nueces y frutas secas (niños mayores de 4 años)
Palitos de celery con mantequilla de maní y pasas
Ensalada de frutas frescas
Cereal seco con pasas y leche baja en grasa
Barras de nueces y frutas

Identifica los problemas de aprendizaje

Ante lo que el mundo afronta debido a la pandemia causada por el COVID-19, el regreso a la escuela ha dado un giro gigantesco y los padres se enfrentan nuevamente a la posibilidad de un homeschooling, más extenso que en la cuarentena. En ese período, muchos padres pudieron darse cuenta de que algunas de las notas de los maestros sobre la conducta del estudiante tenían razón.

“No es algo que no tenga solución. Lo importante es identificar los desórdenes o patologías del aprendizaje, para, de esta forma, comenzar un trabajo en equipo con los profesionales de salud”, explicó la licenciada María Sánchez, patóloga del habla y directora clínica de Precision Hearing and Balance Center, ahora Precision Health, quien agregó que, dentro de este equipo, el patólogo del habla es una pieza clave para el tratamiento y la detección temprana.

“Los tipos de lenguaje pueden ser evaluados desde la infancia, sin embargo, en la edad preescolar se comienzan a evaluar, al detalle, destrezas más específicas como la fonología, la morfología, la sintaxis y la pragmática. La evaluación conlleva un estudio riguroso de las capacidades y las fortalezas de un individuo, así como de sus áreas de necesidad”, detalló, la licenciada Sánchez. Algunas de estas son: déficit de atención, dislexia, disgrafía, discalculia y desorden de procesamiento auditivo (DPA).

“Es importante que los padres puedan identificar estas patologías. Todo diagnóstico a tiempo puede ofrecer una mejor calidad de vida para su hijo”, finaliza diciendo.

Consejos para cuando los chicos salgan de la escuela y lleguen a casa

Tomar las medidas de precaución necesarias para cuando tus niños lleguen al hogar, asegurará una buena salud no solo para ellos, sino también para todos en la familia

Es una buena idea que utilicen desinfectante de manos cuando entre a tu vehículo o al transporte escolar. Si van en el transporte escolar, se debe enfatizar el uso de la mascarilla durante el recorrido.
Cuando lleguen a casa, deben quitarse los zapatos antes de entrar, cambiarse de ropa, y lavarse las manos con agua y jabón inmediatamente.
Pregúntales a tus niños cómo estuvo la dinámica del día y si todos siguieron las directrices de uso de mascarilla, lavando de manos y distanciamiento social.
Vigila a tus niños para identificar si muestran algún síntoma del COVID-19, incluyendo el síndrome inflamatorio multisistémico en niños.
Conversa sobre sus emociones y valida sus sentimientos. Si notas mucha ansiedad, según transcurren los días luego del inicio de clases, consulta con un profesional de la salud mental.

Fuentes: Unicef y Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades