Suministrada

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Una mano amiga en tiempos de crisis

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Fundación Triple-S reconoce la importante labor que realiza el Banco de Alimentos de Puerto Rico

El pastor Urayoán Silva ha sido testigo de muchas crisis en su querido Vieques, y el COVID-19 no ha sido una excepción. En esta ocasión, la falta de acceso a alimentos fue el gran reto para miles de viequenses.

“Las primeras semanas fueron muy intensas. No solo es que había poca comida, es que también el costo de esta subió cerca de un 37%”, explica el pastor Silva, de la organización Fe Que Transforma. Afortunadamente, según el pastor Silva, el Banco de Alimentos ha sido una mano amiga para atender las necesidades de comida de los viequenses.

Señala que el costo de vida en Vieques es al menos un 20% mayor que en la isla grande y el 65% de los viequenses vive bajo el nivel de pobreza. Así que cuando entró en vigor la cuarentena, su impacto en los trabajos “hizo que casi desapareciera lo que quedaba de la clase media en Vieques. Vimos mucha desesperación y depresión”.

Su organización, explica, distribuyó entre marzo y mayo más de 85,000 libras de comidas en la comunidad. “El 70% de esa comida vino del Banco de Alimentos. Así que cuando tú le donas al Banco de Alimentos, le estás donando a Vieques”.

Denise Santos, directora ejecutiva del Banco de Alimentos, asegura que una situación similar se ha vivido en todo Puerto Rico. “Tienes más de 300,000 personas adicionales solicitando desempleo y los pocos ahorros que tenían se fueron para comprar comida”, puntualiza Santos. Explica que todos los donativos en metálico que ha recibido el Banco de Alimentos se han canalizado a través de vales para adquirir comida, pues los comercios y distribuidores que tradicionalmente les donan alimentos no tenían suficiente inventario para abastecer la demanda de sus clientes y al mismo tiempo donarles.

“El Banco de Alimentos es una organización clave para la Fundación Triple-S. En Puerto Rico existe inseguridad alimentaria en tiempos normales y cuando hay crisis por desastres naturales o de salud, la importancia de esta organización toma todavía más relieve. Ese fue el caso luego del huracán María y ahora con el COVID-19 vuelven a demostrar su gran capacidad y agilidad para responder a las necesidades de las comunidades”, expresó Ivelisse M. Fernández, directora ejecutiva de Fundación Triple-S.

El Banco de Alimentos de Puerto Rico se fundó en 1988 para mitigar el hambre y mejorar la nutrición de personas en desventaja. Maneja un centro de acopio y distribución de alimentos que funciona permanentemente y apoyan a más de 150 organizaciones que canalizan su ayuda en toda la isla, incluyendo Vieques y Culebra.