Suministrada
Albergue El Paraíso: comida y techo frente a la necesidad
Presentado por
Fundación Triple-S renueva su compromiso con esta organización de base comunitariaz
La dedicación a las personas sin hogar le corre por las venas a Valerie Guzmán. Su madre, Elsie Solano, fundadora de Albergue El Paraíso, ha dedicado largos años a proveer alimento y vivienda a una creciente población de personas que no cuentan con un techo. Valerie ha seguido su ejemplo, y junto a un dedicado equipo de trabajo, ha hecho frente a la crisis del COVID-19 que sigue tocando a las puertas de miles de puertorriqueños —con o sin hogar.
El perfil de la población a la que tradicionalmente sirve Albergue El Paraíso cambió con la pandemia y la cuarentena. Además de las personas sin hogar, están atendiendo al nuevo desempleado, al inmigrante, a aquellos cuyos ingresos cesaron o se redujeron, y a quienes no han podido acceder a ayudas gubernamentales o, si las reciben, no son suficiente para cubrir sus necesidades de alimentación. Comparte, además, que personas de otros puntos de la isla se han desplazado hacia el área metro en busca de servicios y ayudas.
El Albergue El Paraíso ha ayudado a miles de ciudadanos —con o sin hogar— a paliar la crisis alimentaria que desató el COVID-19. A las personas sin techo se sumaron los nuevos desempleados, inmigrantes y quienes vieron cesar sus ingresos.
“Hay demasiada necesidad. Las filas para comida son más largas y tuvimos que aumentar nuestros servicios de comida a siete días”, expresa Valerie, quien admite que al principio estaba un poco asustada con la dimensión de la crisis. “Pero pensé que si fuimos exitosos luego de María… Y nuestro equipo dijo presente y pudimos ayudar”.
Valerie asegura que no raciona a la hora de atender a su población. “Yo abro a la demanda que tiene la gente por comida. Mientras haya comida, hay que dar. Si racionas causas más pánico. Siempre hay donantes que nos ayudan y aunque constantemente necesitamos esas donaciones, mi deber es ofrecer los servicios”. Valerie afirma que las solicitudes de ayuda son escuchadas y que, de alguna forma, reciben el respaldo que necesitan para continuar con su labor.
Dice que trabajan en coordinación con otras organizaciones y agencias, pues la necesidad es tan grande que una organización no puede hacerle frente sola. El Albergue, además de ofrecer servicios diarios de comida, está entregando cajas con frutas, vegetales y otros comestibles a personas necesitadas.
“Triple-S tiene una larga relación con Albergue El Paraíso y, tras la creación de la Fundación Triple-S, renovamos nuestro compromiso con ellos. Además de atender momentos de crisis alimentaria como la actual, El Albergue ofrece a su población la oportunidad de acceder a vivienda y otros servicios para recobrar la estabilidad”, expresa Ivelisse M. Fernández, directora ejecutiva de la Fundación Triple-S.
Por su parte, Valerie sostiene que, a pesar de la crisis, tiene sus ojos puestos en proyectos e iniciativas que les permitan estar mejor preparados para el manejo de emergencias futuras, entre ellos, cursos de capacitación y la ampliación de espacios para almacenar comida y otros productos de primera necesidad.